Querida Lady Isabella:
No te vas a creer las cosas que han ocurrido en el Bastión. Hace un par de semanas tuve que destapar una autentica conspiración en contra de mi amado abuelo Duncan. Mi abuela (ahora en paradero desconocido) estuvo envenenando poco a poco cada día a su Señor, con un veneno realmente extraño. Yo misma encontré uno de los botellines que contenían la horrible poción en su habitación. Ahi comenzó mi sospecha. Al final, y con la ayuda del chico Tyrell, capturamos a mi hermana a altas horas de la madrugada escapándose por la empalizada. ¿Para qué? Te preguntarás. La muy arpía se citaba en medio del bosque con unos bandoleros que traficaban con el veneno. 5 dragones de oro pagaba por cada botellín, obviamente dinero robado de las arcas de la familia por parte de mi abuela, la cual había prometido conseguirle a mi hermana cosarse con mi querido Ser Reithan. Qué ilusa. Al final destapamos todo el entuerto y mi abuelo la condenó a ser una Hermana Silenciosa. Mi abuela, sin embargo, cosiguió escaparse robando un caballo.
Pero las cosas siguen empeorando. Mi abuela envenenó al Señor de la casa durante al menos 2 meses, y después de averiguar el veneno que le suministraba, el Maestre dice que le queda muy poco tiempo. Quizá semanas. Lo que significa que si mi querido abuelo muere, todo el poder de la Casa caerá sobre mi primo y no sobre mí. Excepto claro está, que yo me case antes. Es por ello, y aqui te doy una buena noticia: he conseguido que mi querido Ser Reithan me acepte como esposa. Debo apresurarme para la celebración, pero los costes de nuestra unión son altos y está siendo complicado realizar la ceremonia debidamente. Aun así, he conseguido que esta misma semana sea la cena de la pedida.
Eso si nada lo impide, porque ayer mismo fuimos atacados por bandoleros y ladrones en nuestro propio bastión. Consiguieron colarse por la entrada de la empalizada, he incluso provocaron un incendio. Menos mal que los hombres de la casa consiguieron reducirles. Incluso una nueva huesped, una chica que ha llegado hace un par de dias diciendo que era caballera. Al principio pensé que estaba loca, pero la verdad es que usa bien la espada y consiguió matar a varios hombres. Ahora mi abuelo la ha nombrado mi escolta personal. Y no solo eso, a mi primo también. Lo que significa que será dificil moverme sin que nadie me controle. Va a ser un horror. Y lo peor de todo es que mi abuelo ha nombrado un nuevo Consejero de la moneda en el Bastión. Un hombre que ha llegado tambien hace pocos días y que antiguamente llevaba las cuentas de mi fallecido padre. No recuerdo tampoco su nombre, pero no me fío de él, ya que posee 3 cuartas partes de las tierras que rodean nuestro Bastión. Quizá quiera apoderarse de todo nuestro potencial comercial, ya que hace muy poco conseguí ganado, semillas de cultivo y un sin fín de animales de granja de los cuales podríamos sacar partido. Incluso ahora tengo un perro, negro como el carbón, un fiel can que conseguí en el mercado gracias a mi astucia. Lo he llamado Sombra.
Querida amiga, ahora que ya casi tenía a mis pies el control del Bastión, ocurren todos estos acontecimientos que me trastocan mis planes. Aun asi, estoy emocionada con mi próximo enlace. Deséame suerte.
Lady Evelyn Greyash.
No te vas a creer las cosas que han ocurrido en el Bastión. Hace un par de semanas tuve que destapar una autentica conspiración en contra de mi amado abuelo Duncan. Mi abuela (ahora en paradero desconocido) estuvo envenenando poco a poco cada día a su Señor, con un veneno realmente extraño. Yo misma encontré uno de los botellines que contenían la horrible poción en su habitación. Ahi comenzó mi sospecha. Al final, y con la ayuda del chico Tyrell, capturamos a mi hermana a altas horas de la madrugada escapándose por la empalizada. ¿Para qué? Te preguntarás. La muy arpía se citaba en medio del bosque con unos bandoleros que traficaban con el veneno. 5 dragones de oro pagaba por cada botellín, obviamente dinero robado de las arcas de la familia por parte de mi abuela, la cual había prometido conseguirle a mi hermana cosarse con mi querido Ser Reithan. Qué ilusa. Al final destapamos todo el entuerto y mi abuelo la condenó a ser una Hermana Silenciosa. Mi abuela, sin embargo, cosiguió escaparse robando un caballo.
Pero las cosas siguen empeorando. Mi abuela envenenó al Señor de la casa durante al menos 2 meses, y después de averiguar el veneno que le suministraba, el Maestre dice que le queda muy poco tiempo. Quizá semanas. Lo que significa que si mi querido abuelo muere, todo el poder de la Casa caerá sobre mi primo y no sobre mí. Excepto claro está, que yo me case antes. Es por ello, y aqui te doy una buena noticia: he conseguido que mi querido Ser Reithan me acepte como esposa. Debo apresurarme para la celebración, pero los costes de nuestra unión son altos y está siendo complicado realizar la ceremonia debidamente. Aun así, he conseguido que esta misma semana sea la cena de la pedida.
Eso si nada lo impide, porque ayer mismo fuimos atacados por bandoleros y ladrones en nuestro propio bastión. Consiguieron colarse por la entrada de la empalizada, he incluso provocaron un incendio. Menos mal que los hombres de la casa consiguieron reducirles. Incluso una nueva huesped, una chica que ha llegado hace un par de dias diciendo que era caballera. Al principio pensé que estaba loca, pero la verdad es que usa bien la espada y consiguió matar a varios hombres. Ahora mi abuelo la ha nombrado mi escolta personal. Y no solo eso, a mi primo también. Lo que significa que será dificil moverme sin que nadie me controle. Va a ser un horror. Y lo peor de todo es que mi abuelo ha nombrado un nuevo Consejero de la moneda en el Bastión. Un hombre que ha llegado tambien hace pocos días y que antiguamente llevaba las cuentas de mi fallecido padre. No recuerdo tampoco su nombre, pero no me fío de él, ya que posee 3 cuartas partes de las tierras que rodean nuestro Bastión. Quizá quiera apoderarse de todo nuestro potencial comercial, ya que hace muy poco conseguí ganado, semillas de cultivo y un sin fín de animales de granja de los cuales podríamos sacar partido. Incluso ahora tengo un perro, negro como el carbón, un fiel can que conseguí en el mercado gracias a mi astucia. Lo he llamado Sombra.
Querida amiga, ahora que ya casi tenía a mis pies el control del Bastión, ocurren todos estos acontecimientos que me trastocan mis planes. Aun asi, estoy emocionada con mi próximo enlace. Deséame suerte.
Lady Evelyn Greyash.
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